Bjarni era un perro como cualquier otro, excepto que tenía la cara desfigurada. Fue rescatado de un hogar difícil y era ignorado por aquellos que pasaban junto a él. Sin embargo, hubo quienes encontraron su historia desgarradora y quisieron apoyarlo.
Bjarni probablemente fue desfigurado como resultado de un ataque por otro animal. Su cara estaba llena de cicatrices de mordeduras y solo tenía la mitad de una nariz. Como resultado, le costaba comer y respirar adecuadamente. Después de ser rescatado, fue llevado de vuelta a sus dueños originales, pero estos se negaron a aceptarlo de vuelta.
No hay muchas organizaciones en Houston, Texas, que se encarguen de cuidar de mascotas enfermas y heridas antes de transferirlas a un refugio. Afortunadamente, Bjarni fue llevado a St. Francis’ Angels, uno de los pocos lugares en la zona que funciona como una organización de hogares de acogida de emergencia.
Bjarni se sometió a una cirugía y su rostro ahora está completamente realineado. ¡Lo mejor de todo es que puede respirar y comer sin problemas! A pesar de haber pasado por algunas experiencias difíciles, Bjarni sigue siendo uno de los perros más amigables que hay.
Aunque puede que no haya recibido el amor y cuidado necesario de sus dueños originales, esta trágica historia tiene un final feliz. ¡Además de recibir la cirugía que necesitaba, Bjarni también ha encontrado su hogar para siempre!