Los perros abandonados, que a menudo ya son víctimas de abuso y abandono, encuentran un destino aún más doloroso cuando son abandonados por sus supuestos dueños.
Estos animales, ya vulnerables por naturaleza, acaban abandonados a su suerte, deambulando sin rumbo por las calles, enfrentándose al hambre, las enfermedades y peligros de todo tipo.
En medio de esta triste realidad surge el caso de un perro que debido a una fractura en la columna quedó indefenso en el suelo, sin poder moverse.
Este animal, ya víctima de un cruel abandono, se encontró ahora ante un nuevo desafío que habría comprometido gravemente su calidad de vida.
Sin embargo, afortunadamente, una mujer de buen corazón entendió su situación e inmediatamente llamó a los rescatistas para ofrecerle al pobre perro una oportunidad de recuperación y una nueva vida.
Un día, una persona amable y amante de los animales encontró un perro abandonado, inmóvil sobre el asfalto. Al verlo así, sintió compasión y decidió hacer algo para ayudarlo. Le llevó comida y agua al perro, pero sabía que no era suficiente.
Entonces llamó a los rescatistas para que lo llevaran a una clínica veterinaria. Los rescatistas llegaron pronto y encontraron al perro debajo de una caja, colocada allí para protegerlo del sol.
El perro fue visiblemente maltratado y sus patas traseras quedaron paralizadas. Sin perder tiempo, los rescatistas lo llevaron al hospital, donde fue operado de una fractura de columna.
La recuperación fue larga y difícil, pero el perro, ahora llamado General, demostró una fuerte voluntad de vivir. Después de ser dado de alta, un voluntario lo recibió en un hogar temporal.
Luego, una amorosa familia lo adoptó a pesar de sus discapacidades. Con el apoyo de su nueva familia, General ha aprendido a superar los desafíos diarios. Aunque su vida ha sido dura, finalmente encontró el amor y la seguridad que se merece.